Qué hacemos para reparar a las víctimas, hacer justicia, acabar con la impunidad y por la construcción de la memoria histórica. En lamayoría de países democráticos el conocimiento del pasado, así como la reparación y justicia para las víctimas de períodos represivos, sonparte de los cimientos del propio sistema. Por el contrario, en elcaso de Espa?a, la debilidad de la democracia tiene su raíz en laimpunidad de la dictadura, el abandono de las víctimas y la ausenciade políticas de memoria. Hablar de memoria histórica no es una vueltaal pasado: es una necesidad del presente, pues no seremos unademocracia plena sin antes reparar y dignificar a las víctimas. Casicuatro décadas después de la muerte de Franco, queda mucho por hacer.La insuficiente ley de memoria histórica, las vías judicialesabiertas, la acción del movimiento ciudadano, y la responsabilidad delos distintos agentes políticos y sociales, centran nuestraspropuestas para construir una memoria democrática. Es decir, paraconstruir democracia.Casi cuatro décadas después de la muerte deFranco, queda mucho por hacer. La insuficiente ley de memoriahistórica, las vías judiciales abiertas, la acción del movimientociudadano y la responsabilidad de los distintos agentes políticos ysociales, centran nuestras propuestas para construir una memoriademocrática