Quizás Dios juega a los dados con el destino de los mortales,desperdigando las piezas de un rompecabezas que siempre vuelve aunirse de un modo u otro. Acaso sea el azar el que nos arrebataaquello que más amamos, pero puede que todo lo que nos ocurre no seasino el resultado de nuestros propios actos.Estas son las preguntas que atormentan a Eduardo, un pintor para quien nada tiene sentido tras la muerte de su mujer y su hija en unaccidente de coche. Una famosa violoncelista, Gloria Tagger, le daráuna razón para seguir viviendo al contratarlo para pintar un cuadro:el retrato de Arthur, el autor de la muerte de su hijo. Aceptar esereto desencadena una cascada de sentimientos que durante muchos a?oshan permanecido ocultos, con cada pincelada, Eduardo va abriendopuertas que habría sido mejor mantener cerradas, pero que, una vezabiertas, nada ni nadie podrá volver a cerrar. En Respirar por laherida, con una trama perfectamente urdida y una intensidaddescarnada, el dolor y la culpa desbordan los límites de susprotagonistas, con una precisión y una psicología digna del maestro en que se ha convertido ya su autor, Víctor del Arbol (premio Le Prix du Polar Européen a la mejor novela negra europea por La tristeza delsamurái, Editorial Alrevés, 2011).Cites per la contraportadaDe La tristeza del samurái, la crítica ha dicho:«Una novela impactante y sórdida que va más allá de los códigosclásicos del thriller. Impresiona la destreza con la que maneja lasidas y venidas de las distintas épocas.» Bastien Bonnefous, Le Monde.«Una novela muy entretenida, muy bien escrita, para mí ha sido todo un descubrimiento. Lo vais a pasar bien con Víctor del Arbol.» OscarLópez, A vivir que son dos días, Cadena Ser.«? pagarás el precio de caer atrapado en una espiral de dolorprolongado, cuya trama parece escrita por el mismo Faulkner.» AlanCheuse, The Dallas Morning News.«La tristeza del samurái es el eslabón que faltaba entre La sombra del viento de Carlos Ruiz Zafón y Millenium de Stieg Larsson.» JeromeDejean, Page des Libraires.