En esta colección de historias entrelazadas, el narrador anónimoconoce a El Hombre Ilustrado, un curioso personaje con el cuerpocompletamente cubierto de tatuajes. Sin embargo, lo más remarcable einquietante es que las ilustraciones están mágicamente vivas y cadauna de ellas empieza a desarrollar su propia historia, como en Lapradera donde unos ni?os llegan un juego de realidad virtual más alláde sus límites. O en «Calidoscopio», el sobrecogedor relato de unastronauta que se dispone a reentrar en la atmósfera terrestre sin laprotección de una nave espacial. O en La hora cero, en el que losinvasores extraterrestres han encontrado unos aliados lógicos ysorprendentes: los ni?os humanos.