El libro se apoya fundamentalmente en los topónimos prerromanos delnorte de Espa?a, con especial atención a los nombres de las zonasasturiana, cántabra y pirenaica. (...) tales nombres sirven al autorpara formular su hipótesis de la existencia de una lengua hablada aloeste del Ródano y común a toda la antigua Europa occidental. Elmétodo comparativo le permite establecer las relaciones probablesentre nombres muy alejados geográficamente y proponer hipótesisetimológicas. Su método se basa no tan solo en la etimología, en elorigen de las formas y las palabras, sino que además procura inquirirla etiología de cada nombre, esto es, las causas de la creación decada topónimo y su relación con las circunstancias que pudieronsuscitar su nacimiento (Javier Terrado)